Locos por el Pastor Alemán.
Cuando un pastor alemán llegó a casa, no imaginamos que traería tanta magia, alegrías e historias imborrables; vivir su presencia por años nos motivó a compartir esta extraordinaria experiencia con quienes aman la familia y prefieren una fresca forma de vida.
Lección de vida
Vivimos con pasión la actividad; no sólo por ser un lindo hobbie o por ser una de las razas más versátiles, equilibradas e incorruptibles que existe; quizás sea por esa naturaleza que nos impulsa al mejoramiento continuo, o porque entendimos que es una actividad en la cual el amor y la familia son imprescindibles.
En torno al perro vive la amistad, es un reto a la paciencia, al rigor y a la planificación. Es además una agradable actividad deportiva… y competir, es darle alas a la esperanza.
Ha sido una lección de vida para nuestros hijos. Porque aquí de poco o nada sirven la suerte y la fortuna; nada llega de la noche a la mañana y los resultados se construyen a pulso, con sacrificio y convicción. Y lo más hermoso: en cada cachorro llega la más perdurable de las herencias: la experiencia viva.
¿Quiénes somos?
Montenegro – Pastores Alemanes. Nuestra familia.
Somos un equipo familiar con amigos y familias, donde lo primero es el bienestar del perro. Nuestra afición la vivimos mi esposa Lina María y nuestros hijos, con familias que aman la raza. Más de 20 años de apoyo total a la actividad en Colombia, con pasión, resiliencia y enfoque.
Hemos participado en numerosos eventos nacionales e internacionales, con actuaciones destacadas en exigentes competencias. Hoy disfrutamos la actividad, y la compartimos con otras familias de locos que aman al perro pastor alemán, disfrutando, creciendo y compartiendo con respeto.
¿Cuál es el mejor camino?
Vivirlo juntos.
Tenemos amigos, que como nosotros, empezaron con un cachorro y hoy son invaluables promotores de la raza.
La idea es dar una mano a quienes quieren vivir la mágica actividad.
Ayudarles a iniciar con éxito el proceso, transmitir la pasión, compartir ideas, retos y esperanzas.
Nuestros amigos no son nuestro negocio; son la semilla de un mañana optimista para la actividad.
El apoyo genuino, no tiene precio.
Locos por el pastor alemán
Familias Montenegro
La mejor demostración que un cultor de la raza puede exponer ante los demás, es la opinión y confianza de familias y amigos que lo aprecian.
+ de
20 años
Respetando una raza.
Familia Trujillo López. «Queremos agradecer a Dios y a Montenegro por habernos dado la oportunidad de tener en nuestra familia a Lexus de Montenegro” Dan” y a D-Aitana de Montenegro, dos ejemplares que llegaron a nuestra familia a llenarla de amor. Tenemos claro que seguiremos con estas hermosas compañías en nuestras vidas y la confianza en Gustavo con cada cachorro que nos entrega. Esperamos que Dios permita gozar de la presencia y amor de ellos por mucho tiempo».
Diana Parra, Andrés Felipe Rayo y «Euro». «Encontrar a Montenegro fue de las cosas que sientes están predestinadas a ser; allí vi corriendo como loco al que sería mi gran amor, Euro de Montenegro. Fue el consentido de la casa y gracias a la guía de Gustavo y Lina teníamos a un campeón, ganando con jueces internacionales y nacionales. Gustavo se desapegó del mejor perro de la camada, porque en nosotros vio la gran familia que tendría y eso valía más que cualquier reconocimiento. Gracias por regalarnos una hermosa etapa de nuestra vida a su lado».
Yesid Duarte y C.-Roma de Montenegro. «Agradecido con Dios y con la familia Montenegro que me permitieran hacer parte a través de C-Roma de Montenegro una cachorra en óptimas condiciones y qué día a día nos da sólo satisfacción y alegría».
Germán Posso, Karina y Falcon. «Hola amigos queremos saludarlos mi esposa y mi hijo. Somos Germán, Karina y Felipe. Hace poco tuvimos la gran dicha de tener en nuestro hogar a Falcon de Montenegro que a la fecha ha sido nuestro mejor compañero y que esperamos que nos acompañe por muchos años. Agradecemos a Montenegro por el ejemplar, por su excelente manejo en la crianza responsable de esta hermosa raza Pastor Alemán».
Iván Carreño con Berlin de Montenegro. «Llegaste en el momento preciso para alegrar nuestros corazones.
Me alegro haber encontrado el criadero Montenegro, el pastor alemán es una raza espectacular y junto a el Señor Gustavo Villegas hemos recibido una excelente atención y acompañamiento para el crecimiento de Berlín, muchas gracias».
Christian Buitrago, su esposa Diana y sus bellos hijos Isabela y Salvador, con Tiana. «Criadero Montenegro….mmm. Tal vez “criadero” no sea el término para describir todo lo que significa recibir una cachorra directamente de las manos de Gustavo y Lina, porque ese es solo el comienzo de una bella historia de amistad y acompañamiento permanente que nos ha permitido conocer, aprender, compartir, disfrutar y triunfar juntos con Nutella y Tiana».
Consejos al buscar
El cachorro pastor alemán de tu familia
La crianza responsable es un arte y no un negocio; es una actividad costosa que muchas veces arroja pérdidas; exige trabajo, amor, rigor y mucho sacrificio.
El comercio irresponsable de perros puede llegar a ser una actividad inhumana y en ocasiones dolorosa para estos nobles animales. Lo recomendable es conversar personalmente con el criador y observar con respeto su labor.
Pregunta, conoce, visita y compara.
Llevar un ser vivo a la casa involucra no sólo alegrías y momentos agradables, sino todo un cúmulo de necesidades vitales, orgánicas, sanitarias, emocionales y financieras que son un desafío para la familia.
Por nada del mundo te quedes con la primera opción.
Visita varios criadores con los cuales hayas conversado previamente y te hayas sentido cómodo y muy bien atendido; pregunta sin restricción sobre todos los temas, el mejor criador es un asesor generoso y transparente.
El criador responsable es aquel que está dispuesto y motivado a explicar a profundidad todas las circunstancias que sean de preocupación o motivo de curiosidad en lo cinotécnico o en el día a día, tocando incluso temas incómodos y explicándolos detalladamente sin el menor asomo de incomodidad o afán; muchas veces las cosas que parecen simples pueden encerrar mayores complejidades para la familia.
Padre y madre deberán estar en excelente condición sanitaria y cumplir con todos los requisitos para la crianza responsable en las instituciones rectoras de la reproducción selectiva; además deben haber sido elegidos cuidadosamente y con un criterio de crianza selectivo y de mejoramiento constante. Deben ser sociables, equilibrados y libres de patologías congénitas y/o dolencias adquiridas – pregunta al criador por estos aspectos.
¿Y la displasia?
Por reglamento, los padres deberán ser libres de displasia en Grado Cero (0)-Normal Libre de displasia. Grado uno (1)-casi normal, ó Grado dos (2)-Todavía permitido. Los grados tres (3)-Displasia Media y cuatro (4)-Displasia Grave, son prohibidos para la crianza. Dentro de las normativas SV, ningún ejemplar puede criar con pedigree, sin ser libre de displasia.
Ningún criador podrá garantizar nunca que un cachorro no sufrirá de alguna patología potencial en su futuro, basado en la buena salud de los padres. Los genes recesivos existen y pueden paarecer de manera aleatoria y perfectamente imprevisible.
Para la salvaguardar la rusticidad y aptitudes de la raza, los padres de la camada no podrán tener un parentesco o consanguinidad menor a 3-3, redundando en el firme objetivo de generar salud y vigor tangibles a la raza. Así se solidifican sus cualidades innatas, tanto fisiológicas como psicológicas, se propende por una rica variedad genética y se promueve un mayor vigor híbrido en las progenies futuras.
El pedigree es una herramienta invaluable para la crianza responsable y selectiva de la raza. Representa el linaje y expone ancestro a ancestro, una bitácora valiosísima de más de 100 años en la crianza, que ha sido perfectamente proyectada. Allí están las líneas de sangre y con un poco de estudio se pueden intepretar las mejores posibilidades de cara al futuro de un ejemplar y su reproducción.
El pedigree es una garantía del cumplimiento de altas exigencias para la crianza, exigidas por parte de las asociaciones e instituciones que velan por la idoneidad, la veracidad y claridad de la reproducción selectiva, entre las cuales se documentan las condiciones óptimas de los aspectos fisiológicos y sicológicos de los padres, se certifican los cruces permitidos, sin endogamias de riesgo, y se descartan las principales patologías que pudieran afectar a los padres. Esto no significa que se pueda garantizar la salud óptima y futura de un cachorro producto de un excelente cruce, pues la genética, las condiciones particulares de cada individuo y su mezcla con el medio ambiente, son perfectamente incontrolables e imprevisibles.
Algunas personas creen que tener un pedigree será garantía de que un ejemplar no llegará a sufrir enfermedades o a estar libre de todo acontecimiento no previsible o planificado; desafortunadamente esto no es cierto. Tu mascota como ser vivo, no será infalible a los avatares del destino y/o riesgos, incluso congénitos, que puedan manifestarse en su salud durante su vida, por lo cual quien asegure que un pequeño cachorro será libre de alguna condición que se pueda manifestar en su futuro, como la displasia u otras condiciones frecuentes, no estará siendo veraz ni ético.
Profundizar sobre estos aspectos es muy importante al pensar en tener un perro.
Los campeones no nacen; se hacen.
Quien se aventure a prometer que un cachorro será un campeón, estará jugando a ser profeta. Los perros exitosos en las pistas de trabajo o estructura, llamados «Campeones», son producto de una mezcla virtuosa entre la genética, la naturaleza, el talento y el trabajo juicioso, planeado con dedicación, perseverancia y conocimiento.
Es virtualmente imposible para cualquier experto llegar a «profetizar» el futuro de cualquier ejemplar por muy hermoso que se vea en su temprana edad. Las sorpresas en la crianza y en el inimaginable desarrollo de los perros están a la orden del día. Son incontables los casos en los cuales el más pequeño y frágil cachorro de una camada ha llegado a ser con amor, dedicación, una pizca de suerte y trabajo, el más impresionante campeón.
Sobre todo sé transparente, claro y veraz, háblale de tus expectativas y tus sueños con el cachorro. Los verdaderos criadores, son genuinos promotores y constructores de la actividad pastorera, muchas veces están dispuestos a sacrificar algo de su inversión con tal de ofrecerle una excelente familia a sus queridos cachorros.
Al visitar una camada -sucede a menudo-, nos embarga una linda y natural emoción de conocer los cachorros que con su ternura nos conquistan, o «enamoran» a algún miembro de la familia nos llevan a elegir de manera apresurada lo que posiblemente será un dolor de cabeza para el futuro.
Las personas con frecuencia piensan que el cachorro les está conquistando o diciéndoles «llévame contigo» y caen en este juego emocional que algunos criadores usan sin piedad para acelerar el cierre de una venta; la elección de un cachorro debe ser un ejercicio racional y realmente bien pensado. Esto es muy frecuente, esa percepción muy humana pero errónea de las actitudes del cachorro causa equívocos de muy largo plazo.
Un perro entra en la vida de las personas en un promedio de 10 años según su expectativa de vida; demasiado tiempo para un error.
Sin bien es cierto, el hecho de que uno o los dos padres sean perros exitosos en su vida competitiva alcanza para pensar en que sus hijos tendrán una calidad por sobre el promedio, dicho argumento no significa gratuitamente que un cachorro sea de una calidad superior en general.
La calidad de los padres, los abuelos y todas las líneas ascendentes o ancestros de calidad, contribuyen, pero no son garantía de éxito en la crianza, y en esos aspectos radica el verdadero arte de la selección.
Hay excelentes reproductores que no son campeones.
Algunos de los mejores reproductores en el mundo no necesariamente han sido perros de gran desempeño en las pistas; pero también es cierto, que un perro de gran calidad no provendrá seguramente de perros mediocres. Existe una máxima en la crianza a la cual hay que prestarle atención:
«Es preferible un perro de mediana calidad de una gran familia, que un cachorro espectacular que provenga de una familia sin importancia».
Algunos aspectos a tener en cuenta:
El carácter y el temperamento lo son todo, sin ellos no existe un perro óptimo; no son características negociables. Si un cachorro no presenta un alegre, confiado y chispeante temperamento, no debería ser elegible. Los padres deben estar bien insertados y bien descritos por el estándar de la raza. Toda exageración de tamaño, peso o largo de huesos y angulaciones, problemas anatómicos, de tipo, color, movimiento y demás elementos, serán heredables directamente a los cachorros de una camada.
Elegir un cachorro es tener la oportunidad de elegir a un gran miembro de familia; la responsabilidad sobre la vida futura del cachorro es del amo, no del criador, quien ha realizado el mejor trabajo posible hasta el día en que se desprende de un gran sueño en su compleja labor.
Preguntas frecuentes
Más de 20 años en la huella Alemana.
Nuestro plan de cría mantiene la ruta de la optimización, la protección y promoción de la raza pastor alemán en Colombia, apoyando las dinámicas de la SV a través de APPA su filial en Colombia, con el objeto de mantener un constante proceso en la crianza y el deporte canino, armonizando con las exigencias y requisitos impuestos por la máxima autoridad especializada de raza en el mundo la SV (Verein für Deutche Schaeferhunde).
- Requisitos APPA – WUSV.
- ADN comprobado
- Dentadura correcta
- Mordida correcta
- Microchip identificación
- Padres libres de displasia
- Placas de cadera y codos
- Consanguinidad mayor a 3-3
- Calificación en exposición
- Pruebas ZAP – BH ó IGP
- Selección de crianza
El Pastor Alemán en el mundo
Desde la la inscripción del estándar para la Raza Pastor Alemán en Alemania en 1.899, sin pausa hasta hoy, reconocidas asociaciones de aficionados y criadores en los países adscritos a la SV, la WUSV o a la FCI, contribuyen al desarrollo de la raza con un trabajo de óptimo rigor técnico y científico.
10 ó 12 años, son poco tiempo para un acierto; pero son una eternidad para un error.
Gustavo Villegas refiriéndose al tiempo de vida en la elección del perro para la familia.
